Fran volvió ayer de su primer día en 3° grado FELIZ. La maestra le hizo chistes diciendo que ella era la más linda de todo el colegio y la sola idea lo enamoró. También pudo abrazar a su maestra de 2°, pero no mucho para no pederse el recreo. Se midió con Simón para ver cuánto habían crecido en el verano, averiguó que los miércoles tiene huerta, del diente que se le cayó, del reencuentro con una amiga muy especial y muchísimas cosas más.
Yo ayer tuve un día bastante ocupado. Acabamos de regresar de vacaciones y tengo muchas TAREAS pendientes de todo tipo, incluyendo laborales, domésticas y afectivas. Sentí que el día avanzaba irrefrenable devorando las horas y a duras penas pude marcar como hechos un tercio de los puntos de la lista que me había propuesto.
¿Cómo logré entonces enterarme de tantas novedades sumamente importantes respecto al primer día de escuela de mi hijo menor?
Bueno, por dos motivos:
– El no trajo tarea.
– Yo tenía tarea y además… acababa de leer este artículo
http://www.latimes.com/…/la-ol-no-more-homework-20150309-st…
A ver, no es que antes de ayer yo defendiera la tarea escolar. En absoluto creo que sirva de mucho, si es que sirve de algo. ¡No me gusta que les manden tarea escolar a casa, detesto la tarea y hasta a veces me enoja cuando es extrema! (tengo reacciones emocionales tan parecidas a las de mis hijos!). No es que antes me gustara la tarea. Es solo que por haber leído esta reflexión, tan simple y a la vez tan cierta, tenía muy presente que en vez de que mi peque se quedara mirando netflix mientras yo hacía «mis tareas» podíamos pelar juntos los tomates de la cena. Nada, nada, nada de todo lo importante y profundo que charlamos escapó a ese momento de encuentro. El resto del día se resumió en conversar sobre cosas prácticas y jugar a armar un dominó alemán como una pista de autos con la dificultad de asociar colores, lateralidad y correspondencia. Un día que tuvo en casa lo que tiene que tener: encuentro, escucha, risa y APRENDIZAJE ESPONTÁNEO Y LIBRE. Pero de eso no hablamos. No. Solo hablamos de lo linda que es su maestra y de lo entusiasmado que está por volver a la escuela.
Hermosamente expresado y muy cierto, felicitaciones!